Bajo el nombre “Publicidad registral del protocolo familiar” el pasado 20 de junio en ESADE FORUM fue presentada la mesa redonda “Publicitad registral del protocolo familiar” dedicada al análisis jurídico-empresarial del Real Decreto que regula la publicidad del protocolo. La jornada fue moderada por Pere Mirosa, decano de Facultad de Derecho de ESADE, y contó con la presencia de Fernando Casado, director general del Instituto de la Empresa Familiar, Luis Fernández del Pozo, catedrático de la Facultad de Derecho de ESADE, Alberto Gimeno, profesor del Departamento de Política de la Empresa de ESADE, y Miquel Roca i Junyent, socio y presidente del despacho de abogados Roca Junyent.Al inaugurar la jornada Pere Mirosa, invitó a reflexionar sobre el Real Decreto de Publicidad del Protocolo Familiar y matizó que es sin duda el tema que ha de interesar a los juristas.
Fernando Casado coincide con Mirosa en declarar que es un tema que “va a dar mucho que hablar” y destacó que su aprobación ha sido el fruto de una larga iniciativa tomada por el Instituto de la Empresa Familiar. Según el director general del IEF, con su aprobación “El Gobierno reconoce una realidad existente que surge como una herramienta para mejorar la gestión de las empresas familiares. Y, por primera vez, se reconoce la existencia del Consejo de Familia”, dijo.
A continuación, Fernando Casado sostuvo que el protocolo debe regular la problemática que surge entre los familiares y la empresa. Y afirmó que la publicidad del protocolo “es una ventaja para la empresa familiar cara a los clientes y posibles inversores”. Esta constatación la acompañó con un dato de EEUU donde, según dijo, “se da más crédito a las empresas que tienen protocolo, porque la transparencia es un estímulo adicional”
El profesor Alberto Gimeno dirigió su presentación del tema desde el punto de vista de las conclusiones recogidas por el estudio Radiografía de la Empresa Familiar. Al comenzar reveló el dato que situaba el protocolo familiar más antiguo del mundo en Japón en el siglo XIX y que en España los primeros documentos datan de los años setenta.
El estudio “Radiografía de la Empresa Familiar” elaborado por ESADE, IEF, BBVA y Family Business Knowledge, distingue dos grandes líneas de protocolo familiar. La primera es el protocolo defensivo, elaborado por la generación en el poder, que lo elabora con la intención de poner límites y reglas en la gestión de la empresa familiar. Según palabras del profesor Gimeno, el protocolo defensivo es el fruto del temor de la generación en el poder y la intención de proteger a la familia. Su redacción suele ser sensata con mucha fuerza jurídica.
La segunda es el protocolo de consenso, protagonizado por la generación que debe regirse por sí misma. En este modelo de protocolo el proceso es más importante que el documento en sí. “Este documento ayuda a que las distintas generaciones pacten, propongan y ayuden a que la generación que va a ser regida acepte que hay que tener reglas” dijo el profesor Gimeno.
Al describir las principales conclusiones del estudio, Alberto Gimeno destacó que “el protocolo no son expresiones de deseo sino reglas que familia se ve capaz de cumplir. Es la hoja de la ruta de una generación.” A continuación, sostuvo que el protocolo no puede verse fuera de la estructura de la empresa familiar y tiene un gran impacto en la profesionalización de la toma de decisiones.
Al final de su presentación destacó que no hay modelos estándares y que “por lo tanto lo importante es pensar en el proceso y saber que forma parte de la estructura institucional.” Alberto Gimeno cerró la primera parte de la mesa redonda manifestando que la publicidad del protocolo “Es una norma que se tiene que practicar y que la familia le tiene que ver el sentido.”
La segunda parte de la mesa redonda tuvo más ímpetu fiscal y la abrió Miquel Roca i Junyent, quien sobre la aprobación del Real Decreto dijo “es una buena noticia, pero lo primero en lo que tenemos que pensar son las limitaciones que se derivan de las crisis entre familia y empresa.
El presidente de Roca Junyent se refirió al proceso de elaboración de la normativa destacando la dificultad de redactar una norma que regula dos ámbitos que generan tanta crisis como son el ámbito de la empresa y de la familia. “Es una buena herramienta pero hay un problema de voluntad que es fundamental”, dijo. Sin embargo, según declaró, la nueva norma “tiene un buen punto de partida: hacer un proyecto de Ley de la Empresa Familiar”.
Para el experto jurista el punto más importante de la normativa es el cambio cualitativo porque según dijo “a partir de ahora, por la vía de las prestaciones accesorias, se puede imponer que los nuevos accionistas sean obligados a respetar el protocolo publicado. Lo que se ha conseguido es oficializar la protección registral de los protocolos”.
La mesa redonda la cerró Luis Fernández del Pozo, quien avisó de que el texto no es suficientemente claro y que deja dudas a la hora de interpretar. También constató que algunos artículos llegan a tener hasta diez interpretaciones distintas y que no se resuelve el derecho fundamental de sucesión.
Al final de su exposición, el catedrático de ESADE destacó que la transparencia es un valor con seguridad jurídica. En sus palabras el protocolo es un contrato base que necesita la ejecución y “la publicidad es un tema instrumental, mientras el tema principal es societario”, dijo.
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