El ministro de Industria, Turismo y Comercio, Joan Clos, se comprometió hoy ante el Congreso a elevar la calidad de la red eléctrica española al nivel de las mejores de Europa, las de Francia, Alemania y Reino Unido, en el horizonte de los años 2009 ó 2010.
Clos, que compareció en la Comisión de Industria para explicar las causas del apagón de Barcelona, destacó que las inversiones en la red de alta tensión se han duplicado desde que el PSOE llegó al Gobierno, y precisó que no se podrán determinar las responsabilidades hasta conocer el informe solicitado a la Comisión Nacional de la Energía (CNE).
El PP aseguró que el apagón de Barcelona es el "réquiem final" a la política energética del Gobierno, mientras que los nacionalistas catalanes se quejaron de la escasez de inversiones en Cataluña.
Para responder a todos ellos, Clos repasó las inversiones de Red Eléctrica de España (REE) en los últimos años y concluyó que "se han más que doblado" desde que el PSOE llegó al Ejecutivo.
Según sus datos, REE invirtió una media de 227 millones de euros entre 2002 y 2004 -208 millones en 2002, 234 millones en 2003 y 243 millones en 2004-, mientras que el promedio se eleva a 515 millones entre 2005 y 2007 -420 millones en 2005, 510 millones en 2006 y 614 millones en 2007-.
Además, el plan de infraestructuras energéticas 2002-2011 contemplaba una inversión media de 400 millones anuales, cifra que el Gobierno del PSOE ha elevado a 600 millones.
Clos dijo que el Ejecutivo socialista ha realizado "esfuerzos económicos importantes" para mejorar la calidad del suministro eléctrico y acabar con "la penuria inversora" de los gobiernos del PP.
En este sentido, recordó que el Real Decreto de Tarifas para 2007 aumentó en 500 millones la partida destinada a la actividad de distribución.
El titular de Industria admitió que existe un déficit de inversión en Cataluña, pero recalcó que no en las redes eléctricas.
En su opinión, la calidad de la red de Cataluña está en la media española o incluso "un poco por encima".
Clos aseguró que la respuesta al apagón fue "rápida" y que los gobiernos central y autonómico lograron coordinarse sin fricciones.
No obstante, admitió que algunos aspectos del apagón fueron "poco frecuentes", por ejemplo que un cable de distribución cayera sobre una instalación de alta tensión o que se tardara tanto en reponer el servicio.
En este sentido, calificó de "normal" el tiempo que se ha tardado en recuperar el suministro en Mallorca tras el corte de esta mañana.
Clos dijo que el Gobierno no escurrirá el bulto en la investigación del apagón, que será "exhaustiva" y llegará "hasta el final".
Sin embargo, insistió en que, antes de delimitar responsabilidades, es necesario contar con el informe de la CNE y responder a tres preguntas: ¿por qué cayó el cable? ¿por qué cayó sobre la estación de alta tensión? y ¿por qué se incendió la subestación de Maragall?
Entretanto, dijo, Industria acelerará los planes ya en marcha en materia de redes eléctricas para evitar que se repitan situaciones como la de Barcelona.
Su departamento revisará las normas que regulan la operación de las redes de alta tensión y tendrá listo antes de fin de año el nuevo plan de infraestructuras energéticas 2007-2016.
Desde la oposición, el portavoz del PP, Fernando Castelló, dijo que el apagón de Barcelona ha supuesto la "esquela definitiva" y el "réquiem final" a la política energética de José Luis Rodríguez Zapatero, marcada por la opa sobre Endesa.
Castelló compartió con los barceloneses la "indignación" y acusó al Gobierno de "cobarde, negligente e incapaz de dar la cara".
También fue muy crítico el portavoz de CiU Josep Sanchez Llibre, quien aseguró que los catalanes "están hartos" y tienen "un cabreo monumental" por las constantes averías en infraestructuras básicas como la electricidad o los trenes de cercanías.
Sánchez Llibre acusó al Gobierno central de "racionar" las inversiones en Cataluña e instó al Ejecutivo a publicar las balanzas fiscales "para que el país se ponga rojo de vergüenza".
En la misma línea, el diputado de ERC Jordi Ramón pidió al Gobierno que calcule con rigor las pérdidas económicas por el apagón y su "impacto" en la imagen de la ciudad, y anunció que su grupo exigirá la "responsabilidad subsidiaria" del Estado por este accidente.
El diputado republicano dijo que tanto REE como Endesa son empresas "controladas desde Madrid" y por ello pidió al Gobierno que las obligue a realizar inversiones en Cataluña "en relación con lo que pagan los consumidores catalanes".
Por último, la diputada de IU-ICV Carme García propuso una batería de medidas para mejorar la calidad del servicio, como destinar parte de los beneficios de las eléctricas al mantenimiento y mejora de las redes.
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