El chicle sin azúcar reduciría el estrés y aumentaría la atención

Masticar chicle sin azúcar puede tener efectos positivos en la salud más allá de refrescar el aliento y aportar un buen sabor de boca. Así se deprende del primer informe sobre los beneficios de masticar chicle, elaborado por el Wrigley Science Institute que sugiere que esta golosina puede proporcionar beneficios para la dieta y el control de peso, alivio del estrés e incluso beneficios para la concentración y la dieta.

Según los artífices del estudio, el chicle puede convertirse en un aliado para prevenir el estrés. Y es que el informe expone que este alimento supone un estímulo para cambiar la actividad que se esté realizando y por ello puede minimizar la aparición de situaciones puntuales; es decir, serviría de instrumento para controlar los picos de ansiedad moderada al cambiar el foco de atención momentáneamente.

Por otro lado, también ayuda a mejorar la concentración. "Se activa el movimiento mandibular y se convierte en un complemento de relajación muscular que permite activar el estado de alerta", explica Mónica Grossoni, especialista en
estrés y tensión.

El chicle contiene de cinco a diez calorías por unidad, por lo que serviría también para reducir la ingesta de calorías de los snack y controlar el peso. "Se puede convertir en un placer que frena el consumo excesivo y evita el picoteo", señala Magda Carlas, nutricionista de la Clínica Eugin, de Barcelona. De este modo, generaría una sensación de saciedad si se ingiere con moderación tras las comidas.

Asimismo, "al no tener azúcar, el chicle reduce el riesgo de caries al generar un aumento de PH y neutralizar los ácidos que se producen", indica Carlos L. García, de la Asociación Profesional de Dentistas.