domingo, noviembre 16, 2008

Escritura Automática: ¿misterio o fantasía...?


Unos la ven como una manera de comunicarse con sus guías, o seres del más allá; otros la consideran una herramienta sicológica que les permite llegar a la mente subconsciente. De cualquier manera, esta antigua técnica puede resultar muy reveladora...

El bolígrafo se desliza rápidamente sobre el papel... La mano que lo sostiene parece volar, dejando a su paso una estela de frases y palabras que brotan libre y espontáneamente, como si emanaran del éter... Cuando termina de escribir, Jessica, de 32 años, lee con sorpresa lo que acaba de plasmar sobre el papel. ¿De dónde salieron estas ideas? Ella se alza de hombros, pues no tiene una respuesta.

‘Comencé a escribir sobre mi relación con mi pareja... Lo hice sin pensar, sin meditar, dejando que la mano se moviera como si ‘algo’ la poseyera, y cuando leí mis palabras, quedé boquiabierta: expresé sentimientos desconocidos para mí. De repente, pude ver claramente cosas que antes me confundían...’.

Jessica está hablando de su experiencia con una técnica conocida como Escritura Automática, que es el arte o la habilidad de escribir ideas o pensamientos —o incluso de extraer información, antes desconocida por la persona— que no provienen de la mente consciente. ¿De dónde surgen, entonces? Ese es el gran misterio...

DEL SUBCONSCIENTE... ¿O DEL MAS ALLA?

La técnica es sencilla: se trata de situar el lápiz sobre el papel y comenzar a escribir dejando fluir los pensamientos libremente, sin tomar en cuenta consideraciones morales, sociales, literarias o de cualquier otro tipo. La meta es vencer o sobrepasar la censura que opera sobre la mente inconsciente, y que nos impide acceder a la información que tenemos almacenada en ella. Precisamente por este efecto liberador, muchos la ven como un recurso literario. De hecho, los surrealistas de la primera mitad del siglo XX usaban esta técnica para ‘liberar’ la mente y crear sin censura, según ellos, desde un lugar más puro, libre y auténtico.

De acuerdo con el sitio de Internet federico.com, ‘el francés André Breton fue pionero en el uso de la Escritura Automática dentro del movimiento surrealista, la cual se convirtió en parte de su repertorio, desencadenando más tarde en un gran número de otros juegos, como el Dibujo Automático’. Es por eso que actualmente artistas, pintores y escritores la usan para estimular la creatividad, despertar la inspiración y vencer el llamado ‘bloqueo del escritor’. Otros han usado la técnica, que es una forma de ‘canalizar’ (channeling), hasta para componer sinfonías.

En realidad, Breton y otros surrealistas solamente seguían la pauta de una de las más famosas practicantes de la técnica: Hélène Smith, una síquica de principios del siglo XX, quien creía que los marcianos intentaban comunicarse con ella a través de la Escritura Automática. Por su gran influencia, los surrealistas la apodaron ‘la Musa de la Escritura Automática’; y en el juego de barajas de los surrealistas, ella es el ‘Genio del Conocimiento’.

La Escritura Automática también ha sido usada en la terapia sicológica, sobre todo la que practican los seguidores del famoso sicoanalista vienés Sigmund Freud, quienes la emplean para ayudar a la persona a explorar su mundo interior y descubrir sus problemas.
Pero quizás el uso más controversial de esta técnica es la comunicación con espíritus o entidades del más allá.

ESTADOS ALTERADOS

‘La Escritura Automática es, esencialmente, un proceso que se lleva a cabo durante un estado alterado de la conciencia, que se le atribuye a los espíritus de los muertos’, es la explicación que aparece en el sitio de Internet prairighosts.com, dedicado a los fenómenos paranormales.

De hecho, muchos creen que los espíritus manipulan la mano del médium —la persona que escribe— para comunicarse, ya que esa persona muchas veces no está consciente de lo que escribe; incluso puede hacerlo con una letra muy diferente de la suya.

La creencia más común es que la persona escribe de manera inconsciente, y los mensajes surgen de la mente subconsciente o de una segunda personalidad que posee percepción extrasensorial. Leonora Piper, una de las médiums más famosas de los Estados Unidos, creía que sus habilidades provenían de una segunda personalidad.

Ante todas estas teorías de médiums, percepción extrasensorial y seres del más allá... ¿Qué opinan los escépticos? Para ellos, la Escritura Automática no es otra cosa que un ‘juego de mesa’ cuyo único efecto es despertar la creatividad de los participantes; también sostienen que los mensajes provienen únicamente de la mente subconsciente de la persona que los escribe, ya que no existe evidencia científica de lo contrario.

Está claro que este tema divide a las personas en dos bandos: las que creen que los escritos provienen de una fuente sobrenatural, y las que los ven como el resultado de un ejercicio mental. Aun así, muchas personas desean ponerlo a prueba, quizás porque, como expresó Albert Einstein, al final, ‘lo más maravilloso que podemos experimentar... es el misterio’.

Si deseas practicar la Escritura Automática, los expertos te recomiendan:

1 - Busca un ambiente tranquilo y callado, que te permita concentrarte.
2 - Serena tu mente, librándola de su constante diálogo interior.
3 - Relaja todos los músculos de tu cuerpo: cuello, brazos, hombros...
4 - Toma un lápiz o un bolígrafo y una hoja de papel en blanco.
5 - Relájate. No temas. Simplemente observa.
6 - Acepta lo que haga tu mano. Quizás se quede quieta, como si no supiera por dónde empezar; tal vez comience a escribir de inmediato, aunque poco a poco. Otra posibilidad es que corra rápidamente sobre el papel, como si tuviera vida propia.
7 - No interfieras en el proceso. Simplemente, deja que tu mano se deslice sobre el papel.
8 - No analices lo que escribes. Déjalo ir. Si lo deseas, enfoca la vista en algún punto cercano al papel, lo cual mantiene ocupado el hemisferio izquierdo del cerebro, mientras el derecho canaliza la información.
9 - Mentalmente llama a tus guías y diles que deseas comunicarte a través de la escritura manual (o la computadora). Déjales saber que solamente puedes comunicarte con un guía a la vez.
10 - Si lo deseas, pregúntale al guía sobre su relación contigo. Se sugiere que empieces con preguntas fáciles, que pueden contestarse con un simple sí o no.
11 - No te preocupes por la puntuación, la gramática o la ortografía; simplemente, escribe sin pensar si lo haces de manera correcta o no.
12 - Si en algún momento te sientes incómoda o molesta con tu guía o con los mensajes que recibes, detente. Si padeces de problemas emocionales, ansiedad o depresión, debes consultar con un sicólogo o terapeuta antes de iniciar este tipo de proceso.

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