Güemes defiende que por cada día de permiso que la madre ceda al padre, éste disfrute de día y medio, con un tope de 8 semanas
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, consideró hoy que la conciliación de la vida laboral y familiar "no es un problema de las mujeres", sino de la población en su conjunto, y advirtió de que, si aquélla no se hace "posible", la sociedad "estará perdiendo talentos y capacidades extraordinarios que tienen las mujeres, por la presión moral de atender sus tareas en lo familiar primero".
En la inauguración del Congreso Mujer, Trabajo y Familia, que en esta quinta edición tiene por lema 'Los hombres también quieren conciliar', Aguirre instó a transmitir en la escuela y en todos los foros el mensaje de que "conciliar es avanzar hacia una sociedad más justa para hombres y mujeres, más próspera y más libre".
A su juicio, es necesario sensibilizar a la población sobre la necesidad de repartir las tareas en el ámbito doméstico, de forma que disminuya la "sobrecarga real y moral" que tradicionalmente soportan las mujeres, lo cual "frena" su desarrollo profesional y personal.
"No es tan difícil conciliar", afirmó la presidenta regional, quien apuntó al buen trabajo que están haciendo algunas empresas en este ámbito, dando flexibilidad a sus empleados para que atiendan a sus obligaciones familiares "sin merma en absoluto de la productividad".
"Al contrario -añadió-, la productividad aumenta, porque son horas mucho más creativas e intensas para los empleados, que se sienten reconocidos en su necesidad de conciliar".
DEMASIADO TIEMPO EN EL TRABAJO
Aguirre --que compareció acompañada de los consejeros de Empleo y Mujer y de Familia y Asuntos Sociales, Juan José Güemes y Beatriz Elorriaga, respectivamente-- se refirió a la "transformación sin precedentes" que en "muy poco tiempo" ha experimentando la sociedad madrileña, donde casi 1,3 millones de mujeres trabajan, lo que supone que en más de un 70 por ciento de los hogares trabajan los dos miembros de la pareja.
En este punto, citó datos de la 'Macroencuesta sobre conciliación de la vida personal y profesional en la Comunidad de Madrid' según los cuales la mitad de los trabajadores de la región reconoce la falta de tiempo libre, y algo más del 40 por ciento cree que llega demasiado tarde a casa y pasa demasiadas horas en el trabajo.
De acuerdo con ese sondeo, las familias que tienen más difícil compatibilizar el trabajo con la vida personal y familiar son las que tienen a su cargo hijos o mayores dependientes, incluidas las monoparentales, grupo compuesto por algo más de la mitad (unos 700.000) de los hogares madrileños.
La presidenta regional destacó las medidas que su Gobierno está llevando a cabo para favorecer la conciliación, principalmente la oferta de plazas sostenidas con fondos públicos de educación infantil para el tramo de 0 a 3 años, aun cuando no es obligatorio ni gratuito --este curso está previsto llegar a 42.700 plazas--, y los cerca de 700 millones de euros que se dedican en 2006 a la atención de las personas dependientes.
"POCO ÉXITO" DEL PERMISO PATERNO
Por su parte, el consejero de Empleo y Mujer advirtió que el permiso por maternidad que rige actualmente en España (16 semanas de las que 13, salvo las tres primeras, pueden ser compartidas entre padre y madre o incluso ser cedidas íntegramente al padre), establecido por la ley de 1999, "ha tenido bastante poco éxito".
"Todavía hoy cuando un empresario contempla la posibilidad de contratar a un hombre o una mujer en edad de tener hijos, todavía tiene ciertas reticencias a contratarla a ella, porque sabe que es quien se toma ese permiso de maternidad en la mayoría de los casos", explicó Güemes.
En este sentido, defendió una de las propuestas lanzadas por la Asociación Mujer Familia y Trabajo, organizadora del congreso, consistente en que de las 16 semanas de permiso disfrutables en el caso de parto simple, por cada día que la madre ceda al padre éste pueda tener día y medio con un tope de 8 semanas, de forma que si él aprovecha al máximo esta posibilidad, la pareja en su conjunto disfrutará no de 16 semanas, sino de 20.
Güemes consideró que "así, los hombres tendrían un incentivo muy poderoso a la hora de compartir esas responsabilidades familiares, y cuando un empresario se enfrentara a la contratación de un hombre o una mujer, no sabría muy bien quién se va a tomar el permiso".
Por ello, el consejero de Empleo y Mujer opinó que se trata de "una medida muy buena, no sólo desde el punto de vista de la conciliación sino también de la igualdad", precisamente cuando en España se inicia ahora la tramitación parlamentaria de una Ley de Igualdad que modifica el disfrute del permiso de maternidad y paternidad.
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