domingo, octubre 12, 2008

Los estadunidenses votarán mentalmente perturbados


Dentro de 25 días los estadunidenses votarán con el país sumido en una profunda crisis financiera. Nunca habían visto nada parecido, por lo que el pánico y la incertidumbre de lo que ocurrirá en un futuro inmediato les está pasando factura mentalmente.

Los que acudan (y se espera que, esta vez sí, se animen a votar y dejen de lado su tradicional apatía), lo harán bajo niveles alarmantes de estrés, al menos así lo afirma la American Psychological Association (APA), cuyo último reporte dice que 8 de cada 10 adultos están estresados y 3 de cada 10 están en “bajo estrés extremo” por culpa del miedo a perder el trabajo o a no poder hacer frente a las deudas cuando Estados Unidos entre en recesión, como parece inevitable.

De esta legión de estresados el que más lo estará sin duda es el candidato republicano John McCain, que tiene todos los boletos de la rifa para convertirse en la gran víctima política de esta crisis financiera, a la que muchos compatriotas ven como la consecuencia directa de años de economía neoconservadora auspiciada por el presidente George W. Bush.

Si, como dicen las encuestas, gana finalmente Barack Obama en gran parte será consecuencia del voto de castigo de un electorado que quiere de esta manera hacer pagar a la actual administración republicana su rabia contra esos ejecutivos de Wall Street, con sueldos insultantemente millonarios y que han causado la actual debacle que tendremos que pagar todos.

Y si a la izquierda de Bush los electores están enojados, a la derecha también. Los 700 mil millones de dólares propuestos por Bush para rescatar de la quiebra a las grandes firmas estadunidenses, es percibido por muchos conservadores como un regreso a marchas forzadas hacia el intervencionismo estatal que tanto ha criticado el presidente durante su mandato. Esta conversión al “socialismo capitalista”, que provocó que muchos legisladores republicanos votaran el paquete de ayuda con la nariz tapada, es visto como una traición por parte de los defensores a ultranza del ultraliberalismo, y son muchos votantes los que consideran que esta decisión de Bush, apoyada por un resignado McCain, es un primer ataque a los ideales de esa derecha bíblica que profesan millones de estadunidenses.

Hace unos días se preguntó el candidato republicano en un mitin: ¿Quién es verdaderamente Obama? Pues bien, muchos sectores del ala dura republicana se deberían estar preguntado ahora, a menos de cuatro semanas para las elecciones: ¿Quién es verdaderamente McCain? ¿Representa realmente los valores conservadores que quieren que tenga el presidente de EU?
Para la columnista ultraconservadora, Michelle Malkin, con políticas como la de Bush, bendecidas por McCain, “¡Estados Unidos está al borde del socialismo!”. Ver para creer: los fundamentalistas republicanos —religiosos y antiintervencionistas— están tan desconcertados que sólo les queda la esperanza de que Sarah Palin llegue rápido a la presidencia y actúe como lo que ella dijo ser: un pitbull de labios pintados. Si esto ocurre, al menos su imitadora Tina Fey, de Saturday Night Life, tendrá su trabajo garantizado.

No hay comentarios: