Ben Bernanke, presidente de la Reserva Federal estadounidense efe
Si no hay ninguna sorpresa de última hora, algo muy habitual en los días tan ajetreados que viven los mercados, una de las grandes citas de la próxima semana será la penúltima reunión del año de la Reserva Federal estadounidense (Fed). El miércoles 29, Ben Bernanke, presidente de la Fed, dará a conocer si su institución vuelve a tirar de munición. Con la recesión económica llamando a las puertas de Estados Unidos y las Bolsas en caída libre, los expertos esperan que la Fed baje de nuevo los tipos, aunque en esta ocasión, un 0,25% para que queden fijados en el 1,25%. El comité de la Fed coincide prácticamente con la aparición de un dato muy esperado. El jueves 30 se publicará la cifra adelantada del PIB (Producto Interior Bruto) del tercer trimestre de Estados Unidos, que confirmará el delicado estado de la primera economía del mundo.
Turno para Japón
El viernes 31 le toca el turno al Banco de Japón. La autoridad monetaria nipona no se sumó, el pasado 8 de octubre, a la acción coordinada de los principales bancos centrales, que decidieron bajar los tipos medio punto, aunque mostró su total apoyo a esta iniciativa. Ahora, sin embargo, ante el deterioro de la situación económica, parece que el banco central japonés seguirá los pasos de la Reserva Federal y dejará el precio del dinero en el 0,25%, muy cerca de nuevo del «tipo cero».
En Europa, si no se produce alguna reacción antes de tiempo, tenemos que esperar hasta el 6 de noviembre para que el Banco Central Europeo (BCE) se una a Estados Unidos y Japón. Los tipos en la zona euro se encuentran en estos momentos en el 3,75% y, a priori, los analistas manejan que bajen hasta el 3,50%.
Más paro
La semana también servirá para conocer más datos que reflejarán el alcance de la actual crisis. En Alemania, un indicador muy seguido por analistas e inversores es el índice IFO de confianza empresarial. Los expertos anticipan que el dato será peor que el del mes de septiembre, cuando marcó su nivel más bajo de los últimos tres años. También se conocerá la tasa de paro de octubre de Alemania y la de la zona euro de septiembre. Todas las previsiones apuntan a malas noticias. La semana se presenta muy movida.
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