El mexicano Manuel Uribe, a quien el Libro Guinness de los récords registró como el hombre más gordo del mundo, se casó el domingo en Monterrey, en una ceremonia que atrajo a una legión de medios nacionales e internacionales, que no pudieron acceder al lugar del enlace.
El canal estadounidense Discovery Channel y la revista mexicana T.v.Notas obtuvieron la exclusiva de la boda, que se celebró a puerta cerrada en un salón de fiestas. Al resto de medios, algunos llegados desde Japón, Argentina o Alemania, se les prohibió la entrada. Y no se permitió a los invitados llevar cámaras fotográficas o teléfonos móviles.
Uribe llegó a pesar 590 kilos y fue récord Guinness en 2007. Aunque desde entonces adelgazó más de 230 kilos, sigue sin poder caminar desde hace siete años. Una grúa lo trasladó en su cama con ruedas desde su casa en el municipio de San Nicolás de los Garza hasta el Club de Leones de Monterrey, donde dio el 'sí, quiero' a su novia, Claudia Solís. El recorrido de la grúa duró 40 minutos y fue escoltada por patrullas de tráfico. Al enlace civil le siguió un pequeño acto religioso cristiano.
Antes de la recepción, en la que está actuarán cinco bandas, los recién casados bailaron un vals tomados de las manos, ella de pie y él tumbado en su cama. "Estoy muy contento. Es un día muy especial para mí y Dios ha permitido que este día llegue y que haya encontrado una mujer hermosa como Claudia para empezar una nueva aventura juntos", dijo Uribe en una rueda de prensa antes de la boda. "Tuve un sueño. Soñé que tenía dos hijos y que eran gemelos. Espero que se cumpla igual que cuando soñé que me casaba".
Uribe comentó que la luna de miel la pasará en casa con su esposa, un apoyo decisivo durante sus dos años de noviazgo para motivarle a iniciar una estricta dieta. "Estoy feliz. Me voy a casar porque nos amamos. Todas las personas que se casan es porque se aman. No hago caso a los comentarios de la gente porque sino te mueres", dijo a los medios la novia.
Claudia Solís es viuda de un viejo amigo de Uribe, un hombre que también llegó a pesar 250 kilos y que los presentó antes de morir por un paro respiratorio masivo. El médico que diseñó la dieta de Uribe, el estadounidense Barry Sears, dijo a los medios que lo veía "muy saludable y con el estado de salud de un adolescente a pesar de su problema de obesidad"."En dos años, está preparado para tener hijos", pronosticó el doctor. La pareja eligió para la recepción un menú bajo en calorías que incluye "una crema de champiñones, una pierna con muslo deshuesada, bañada en crema de almendras, y verduras a la mantequilla. Y para beber whisky, refrescos, tequila y bebidas preparadas".
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