La nueva Constitución venezolana que surgirá de la reforma que sería aprobada este año cambiará su caratula de azul a rojo, dijo el sábado el presidente Hugo Chávez.
El mandatario presentó a la Asamblea Nacional de Venezuela su propuesta de reforma de 33 de los 350 artículos de la actual Carta Magna, que el propio Chávez impulsó al llegar a la presidencia en 1999.
"Después que aprobemos la reforma, propongo que el libro se convierta de azul a rojo, el libro rojo, rojito," dijo Chávez con los dos ejemplares, azul y rojo, en la mano, en una asamblea de su partido socialista.
El rojo es el color adoptado por el Gobierno de Chávez como emblema de su autoproclamada revolución en la nación petrolera. El mandatario y sus seguidores suelen asistir con frecuencia vestidos de ese color a actos públicos.
El presidente sostiene que el principal objetivo de la reforma de la Constitución es transferir poder al pueblo y sentar las bases para transformar a Venezuela en un país de economía socialista.
Sin embargo, opositores al presidente venezolano denuncian que la reforma socavará las garantías a la propiedad privada y aumentará desmedidamente las atribuciones del jefe de Estado, cuyo mandato se ampliaría de seis a siete años con posibilidad de reelección continua.
En la reforma también se propuso la eliminación de la autonomía del Banco Central y la administración de las reservas internacionales del país por parte del propio presidente de la República, retirando esta función al Banco Central.
El Parlamento venezolano, dominado por seguidores de Chávez, dio luz verde al proyecto propuesto por Chávez, el cual será sometido a un referendo este año.
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