La Reserva Federal de Estados Unidos recortó el martes su tasa de referencia en 50 puntos básicos, en un intento por proteger la economía de la desaceleración del sector inmobiliario y de las turbulencias en los mercados.
La decisión unánime del Comité Federal de Mercado Abierto lleva la tasa de interés a 4,75 por ciento, su menor nivel desde mayo del año pasado. Se trata de la primera rebaja en el costo del dinero desde junio del 2003 y del primer recorte de medio punto desde noviembre del 2002.
La Fed también bajó la tasa de descuento que cobra a los bancos por préstamos directos en medio punto, a 5,25 por ciento.
Los mercados financieros esperaban ampliamente que la Fed redujera la tasa, pero estaban divididos en torno a si la baja sería de un cuarto de punto o más intensa, de medio punto.
"Es difícil interpretar cuales serán las ramificaciones. El recorte de tasas de la Reserva Federal podría sugerir que las dificultades dentro del mercado crediticio son mayores de lo que la gente pensaba y que la Fed estimó que ahora era necesario un movimiento agresivo," dijo William Sullivan, economista de JVB Financial Group en Boca Ratón, Florida.
Los precios de las acciones y de los bonos estadounidenses subieron, mientras que el dólar cayó por la decisión. El índice de acciones líderes del Dow Jones subía más de 190 puntos, o casi 1,5 por ciento, minutos después de anunciada la decisión de la Fed.
"La acción de hoy tiene la intención de ayudar a prevenir algunos de los efectos adversos en la economía en general que de otro modo podrían surgir a partir de las perturbaciones de los mercados financieros, y de promover un crecimiento moderado con el tiempo," dijo la Fed en un comunicado sobre su decisión.
El banco central estadounidense dijo que aún pensaba que la economía enfrentaba algún riesgo por la inflación, pero sostuvo que los acontecimientos en el mercado financiero desde su último encuentro a principios de agosto, habían incrementado la incertidumbre que rodea el panorama de la economía.
"El Comité continuará evaluando los efectos de esos y otros acontecimientos en las perspectivas económicas y actuará como sea necesario para alentar la estabilidad de precios y el crecimiento económico sostenido," señaló el comunicado.
La decisión se toma al acumularse evidencia de que una caída prolongada en el sector vivienda de Estados Unidos y una reciente turbulencia en el mercado financiero han cobrado su cuota en la amplia actividad económica del país.
Una baja en el empleo en agosto, la primera caída en cuatro años, pareció confirmar que los problemas relacionados con el sector vivienda afectaban a las empresas e impactaban en las familias.
Adicionalmente, informes débiles de ventas minoristas y de producción industrial en agosto golpearon la actividad.
En su último encuentro regular del 7 de agosto, el banco central de Estados Unidos había dicho que su preocupación predominante era la inflación, pese a que destacó que se registraba un mayor endurecimiento del crédito y volatilidad en los mercados financieros.
El banco central intervino luego el 17 de agosto con un sorpresivo recorte de la tasa de descuento y un explícito reconocimiento de que los riesgos al crecimiento de la economía estadounidense habían "aumentado considerablemente."
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