El estilo de la vida sedentario que predomina en el mundo, es un factor importante para que la población desarrolle sobre peso y obesidad, ya que la vida moderna proporciona escaleras eléctricas, abuso del automóvil, elevadores, aparatos con control remoto, teléfonos y otros.
Esto aunado a la predisposición genética además de la ingesta desproporcionada de calorías con relación al gasto energético, dan como resultado la acumulación de tejido adiposo con el consiguiente aumento del índice de la masa corporal, lo cual representa un alto riesgo para la presencia de diversas enfermedades dentro de las que se consideran las crónico degenerativas como diabetes mellitus e hipertensión arterial principalmente que están muy asociadas a otras patologías igual o más agresivas.
Tales comentarios los señaló con énfasis, la Doctora Patricia Herrera Gutiérrez, Secretaria de Salud en Durango, para enseguida mencionar que en nuestra población mexicana, el problema se presenta entre todos los grupos de edad, situación que afecta a todo el núcleo familiar y no solamente a quien la padece, por lo que considera de suma importancia, la vigilancia en la alimentación y procurar un cambio en el estilo de vida y tal como la persona fue ganando peso paulatinamente, de la misma forma se tiene que actuar en retrospectiva en forma lenta y gradual pero con ritmo fijo pero seguro.
De acuerdo a estudios profesionales realizados en este importante tema de prevención de la salud de la población, se conoce que no necesariamente los hijos de padres con sobrepeso y obesidad, tienen hijos que desarrollen el mismo problema, sin embargo, un padre o madre pasado de peso, tiene la probabilidad de que su descendencia desencadene la misma situación en un 50 % en cambio, cuando ambos progenitores tienen esta característica, el porcentaje se dispara hasta en un 80 %.
También se tienen casos registrados, en donde ninguno de los padres es obeso, sus hijos tienen la eventualidad de tener sobrepeso en un 10 % más sin embargo, si desde el nacimiento se tiene una predisposición patológica, habrá de tomas las prevenciones necesarias mediante buenas prácticas de alimentación y ejercicio, para evitar que se llegue a un punto en donde el problema se convierta en una verdadera amenaza para la calidad de vida de una persona, dijo finalmente.
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