ANICETO CHARRO, Catedrático de Endicronología y nutrición

"La dieta atlántica se está abandonando por comidas importadas", afirma



Cuál es el diagnóstico de la alimentación del siglo XXI?
- Mal no podemos alimentarnos porque cada vez vivimos más. Sin embargo, tenemos varios problemas. Uno, muy grave, es la obesidad. En Galicia y el norte de España es donde menos accidentes cardiovasculares hay porque comemos mucho pescado, uno de los pilares de la dieta atlántica. Galicia es también la comunidad con menos población adulta obesa. Sin embargo, es la que tiene un mayor número de niños y adolescentes obesos.

- ¿Y cómo hay que interpretar estos datos?
- Es algo preocupante. Tenemos un tipo de vida distinto, y hay un cambio de hábitos alimenticios y de la conducta. La obesidad no se basa sólo en la dietética, sino que hay otros factores que influyen como la comida basura, el estrés, incluso la genética. También hoy hay más facilidad que nunca para acceder a la comida...

- ¿Se está abandonando la dieta atlántica?
- Sí y sería dramático que perdiéramos nuestros hábitos dietéticos ancestrales por comidas importadas de otros países. Yo siempre decía que la ventaja de la dieta atlántica frente a la mediterránea era que aquí se mantenía. Quien viene a Galicia lo hace para comer dieta atlántica: pescado, marisco, verdura gallega, ternera... Pero la juventud está empezando a comer lo que todos comen: pizzas, hamburguesas... Y esto se nota porque cada vez hay más jóvenes obesos. Esto no quiere decir que la comida rápida sea mala. Depende de los alimentos y de cómo estén preparados.

- La obesidad está considerada una pandemia, pero ¿se están adoptando medidas para combatirla?
- La obesidad es un problema mundial y la batalla tiene que ser frontal. En nuestro país también es un tema clave, lo que pasa es que es muy difícil imponer medidas y sobre todo que se acepten por las distintas comunidades porque cada una tiende a ir por su lado. En Galicia se está desarrollando el programa Perseo para educar a los escolares en la nutrición, pero obtener resultados llevará su tiempo porque hay muchos factores implicados.

- ¿Es importante también la educación en casa?
- Sin duda. La familia es clave. Hoy no dedicamos el tiempo suficiente a nuestros hijos. Los niños comen solos o en el colegio; no tienen los conceptos adecuados de lo que es una buena nutrición. Que los hijos aprendan a comer con los padres es fundamental y eso se ha perdido.

- La obesidad es un problema que alarma a las autoridades sanitarias, pero existen otros trastornos como la anorexia. ¿Es igualmente graves?
- Más aún porque, lamentablemente, muchas personas se mueren por no comer, y es un problema que está aumentando. Generalmente son trastornos debidos a una nutrición inadecuada e interrelacionados con la obesidad. En la mayoría de los casos se trata de personas obesas depresivas y que han iniciado distintas dietas para adelgazar, generalmente sin el asesoramiento médico.

- ¿Con ayuda de "productos milagro"?
- El 70% de las personas que quieren adelgazar no acuden a un especialista y van a funambulistas que les dicen que con dar tres golpes en la mesilla van a perder tres kilos. Esto es lo que quieren oír y no que les digas que tienen que cambiar su conducta, controlar su vida, hacer ejercicio...