Endocrinóloga. Estudia y trata en el Hospital de Sant Pau, de Barcelona, las consecuencias internas del estrés que se mantienen semanas o meses. Investiga la repercusión hormonal
--Todos sentimos en algún momento una especie de miedo escénico, una reacción que es positiva en situaciones en las que te juegas la supervivencia: si vas por la calle y ves que se te viene un coche encima, será bueno que reacciones y des un salto poniendo en marcha los mecanismos del estrés. Salvarás la vida.
--Ese no es el estrés habitual.
--Claro que no. El estrés acelera y mantiene en estado de alerta el sistema hormonal, muscular, cerebral y cardiaco, todo lo que, por ejemplo, necesitan los animales para cazar. Pero cuando se mantiene el cuerpo permanentemente acelerado, con el corazón a tope y en una situación que te supera psíquica y emocionalmente, se pierden los ritmos de todos los sistemas del cuerpo.
--¿Y?
--Si el desgaste se perpetúa, el estrés se traduce en un malestar físico que a veces se convierte en irreversible. La hipertensión causada por estrés se mantiene, muchas veces, cuando ya no se está estresado.
--¿Qué hace el estrés por dentro?
--Un encadenado de cambios hormonales. Aumenta el cortisol --la cortisona--, y las catecolaminas --adrenalina, noradrenalina y dopamina--, las hormonas que producen las glándulas suprarrenales. Esas sustancias causan vasoconstricción, las arterias se hacen más estrechas y como el líquido sanguíneo es el mismo, circula a más velocidad y sube la presión. Es un aumento brutal e instantáneo de la tensión arterial que provoca que el corazón vaya más rápido. Todos esos cambios ocurren también cuando estás asustado.
--¿Cómo se perciben?
--Con un cierto temblor de manos, boca seca, insomnio, ansiedad, dificultad para concentrarte, apertura exagerada de los ojos, mariposeo en el estómago... Una persona permanentemente estresada tendrá taquicardia, porque su corazón irá más rápido, y tenderá a la hipertensión. El aumento de cortisol, además, causa intolerancia a la glucosa y crea un depósito de grasa en el abdomen que no está relacionado con la dieta.
--¿Se engorda por estrés?
--Hablo de un aumento de la grasa abdominal, pero el resto del cuerpo no engorda. El tronco adquiere forma de tonel. Esta situación descalcifica los huesos y disminuye la masa ósea, afecta a las hormonas sexuales e inhibe la hormona de crecimiento. Puede llegar a ser muy grave.
--En todo intervienen las hormonas.
--Las hormonas modulan todas las funciones del cuerpo, porque circulan a través de la sangre. Están dirigidas desde el hipotálamo, en el cerebro, que actúa a través de la hipó-
fisis como un director de orquesta.
--¿El estrés aumenta el colesterol?
--No. Lo que ocurre es que muchas personas estresadas no paran de comer, y lo que pican son patatas chips, olivitas, un poco de embutido... Eso aumenta la grasa de la sangre, el nivel de colesterol, que conduce a la arteriosclerosis y a las enfermedades cardiovasculares.
--¿Y si todo eso se mantiene?
--Un estrés muy, muy límite, sostenido en el tiempo, puede ser mortal. Pero ha de ser muy extremo: por ejemplo, el que sufren los presos de Guantánamo (base de EEUU en Cuba), que están machacados de forma inmoral durante meses o años. Pueden acabar con una crisis hipertensiva que les cause un infarto.
--Eso en situación extrema.
--Claro. Cada persona tiene un umbral de tolerancia. Unas tienen un gran aguante y autorregulación que las hace aparecer la mar de calmadas en situaciones de gran estrés. Otras, a la mínima saltan. Esto es como todo en la vida: si vas acelerado todo el día, pero al llegar a casa cenas, ves la tele y desconectas, no pasa nada. El problema es no ser capaz de desconectar del todo.
--¿Qué ocurre entonces?
--Pues que no puedes dormir, porque el cuerpo está día y noche en situación de alerta, y, en consecuencia, no te recuperas. Te despiertas a media noche, preocupado, cansado. La bola de nieve se va haciendo cada vez mayor y llega a ser patológico. El estrés deja de ser tolerable cuando no puedes desconectar de lo que lo causa, dormir y divertirte.
--¿Quienes sufren todo eso identifican que se debe al estrés?
--Suelen consultar con el médico cuando sienten ansiedad o no pueden dormir, pero, si les preguntas, compruebas que sufren estrés. A todos nos aprietan en el trabajo, pero a algunos, nada más llegar por la mañana, el jefe, en lugar de animarlos, los machaca, o no les hace ni caso, los ignora: esa es una de las principales situaciones que causan estrés intenso y sostenido. En especial, en personas para las que el trabajo es su vida: si no se pueden desarrollar, y los humillan a diario, acaban mal.
--¿Es un problema occidental?
--Sin duda. Aquí todo está dirigido a ser cada vez más competitivos. En Oriente lo tienen todo montado de otra forma. Algo falla aquí.
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